Lunes por la tarde, 25 de febrero de 1957. Hola, hola. Ya iba siendo hora de que me sentara y apuntase algunas cosas sobre Cambridge, la gente, lo que pienso. […] En Wellesley solía sentarme en las escaleras de la entrada y, mientras lamentaba mi inactividad, mascullaba para mis adentros: «Ah, si pudiera viajar, conocer…
Categoría: Diarios de escritoras
«Un día detestable para la escritura»*, Katherine Mansfield
1915 2 de enero. Una mañana y una tarde horribles. Je me sens incapable de tout1, y al mismo tiempo no estoy escribiendo muy bien. Debo terminar mi historia mañana. Debería trabajar en ella todo el día… sí, todo el día y también la noche, de ser necesario. Un día detestable. J’ai envie de prier…
«Aquello que me emociona»*, Murasaki Shikibu
[1010] 2. VIGÉSIMO DÍA, DE MADRUGADA: EL RITUAL DE LOS CINCO MÍSTICOS REYES Transcurre todavía lo más negro de la noche; cubierta de nubes está la luna y oscuras sombras yacen bajo el follaje. Mientras tanto, las doncellas: «Habrá que abrir ya las rejillas externas de la alcoba de Su Majestad la Emperatriz, ¿verdad?». «Mas…
«¡Cuánto anhelo rendirme!»*, Susan Sontag
[1948] 19/8/48 Lo que una vez pareció un peso apabullante de pronto ha cambiado de posición, en una táctica sorprendente, oscila bajo mis pies huidizo, se convierte en una fuerza de succión que me arrastra y agota. ¡Cuánto anhelo rendirme! ¡Cuán fácil sería convencerme a mí misma de la verosimilitud de la vida de mis…
«Ser un verdadero artista»*, Laura Freixas
BARCELONA, 10-14 DE FEBRERO Más sobre Tatiana. Lo que me ha gustado realmente de ella es esa buena fe —lindante incluso con la ingenuidad o el desamparo—, una de las cualidades que más aprecio. Es la que distingue, por ejemplo, a Fernando de Edgar; este es más culto, más cosmopolita, más «interesante», pero su engolamiento…
«¡Consentid que pueda leerlos todos!»*, Sarashina Nikki
[1060] I. El viaje hacia la capital LA PARTIDA: ¡NOS DIRIGIMOS A HEIANKYO! ¡Por gracia, permitidme que pueda ir a la capital a leer El Relato de Genji! ¡Cuán rústica e inculta habría podido ser, criada en una remota comarca, allende el más distante extremo del camino de Azuma! No obstante, al llegar a conocer…
«Uno cree que vive», Anais Nïn
[Invierno 1931-1932] Se vive así, cobijado, en un mundo delicado, y uno cree que vive. Entonces lee un libro (Lady Chatterley, por ejemplo), o va de viaje, o habla con Richard, y descubre que no vive, que está simplemente hibernando. Los síntomas de la hibernación se pueden detectar fácilmente. El primero es la inquietud. El…
«Vivir todas las vidas»*, Sylvia Plath
1952 Entrada 46 ¿Qué es mi vida y qué voy a hacer con ella? No lo sé y estoy asustada. Nunca podré leer todos los libros que quiero, nunca podré ser todas las personas que quiero ser y vivir todas las vidas que quiero. Nunca podré entrenarme en las destrezas que quiero. Y, ¿qué es…
«El único consuelo a los pesares de mi vida», Murasaki Shikibu
[19 de septiembre de 1008] DÉCIMA JORNADA DE LA SÉPTIMA LUNA: ESTADO OTOÑAL DE LA MANSIÓN DEL TSUCHIMIKADO Conforme el viento otoñal asoma risueño, sin par se muestra el donairoso encanto de la mansión del Tsuchimikado. Las copas de los árboles cabe el estanque, las matas vecinas al arroyo ostentan sus variados colores, de más…
«La idea de la obra»*, Katherine Mansfield
1914 31 de marzo. Una mañana espléndida, pero como sé que tengo que ir a cambiar el cheque y pagar las cuentas, no puedo hacer nada y me siento desgraciada. La vida es un asunto odioso, no se puede negar. Cuando G. y J. estaban hablando en el parque del bienestar físico y de cómo…